Después de un año increíble en general, y sobre todo en materia de pesca, esta mañana nos hemos ido el amigo Kike y yo a intentar cerrarlo con la última captura.


A primera hora de la mañana y viendo el color del cielo, nos hemos dedicado a practicar y mejorar nuestros lances, intentando librarnos de la lluvia, cosa que ha sido inevitable. Tras el chaparrón y con el hombro ya caliente, nos hemos dedicado a buscar ese último pez del año.

Cómo era de esperar, los peces no aparecían por ningún sitio, hasta que al final de la mañana, cerca del mediodía ha comenzado la actividad, pudiendo cerrar así el año con una captura cada uno ( "peasooo" de alburno el de Kike).


Casualidades de la vida, este último barbo ha salido en el mismo sitio que el primero del año.
Comienza en unas horas un nuevo año, y por consiguiente una nueva temporada.
SUERTE A TODOS